¿Recuerdas, amor, cuándo nos descubrimos
buscándonos
cuándo empezamos a contarnos nuestra vida
sabiendo que lo que vendría, de nosotras
en adelante
era la historia que nos explicaba:
que nacíamos para salvarnos de la realidad
que nos desolaba y moriríamos cuando
consiguiera desolarnos
cuándo dejamos de creer en el destino
y nos pusimos a construir el futuro
(porque nos teníamos a mano
cuándo me pediste que saliera contigo y fuiste tú
la que te quedaste conmigo
cuándo nos mudamos de piel y nunca más
volvimos a ser las mismas?
¿Recuerdas cuándo nadie nos había
hecho sentir
que éramos únicas
ni nos había alentado con aliento
ni se había bañado en nuestra tristeza
ni se había bebido nuestras lágrimas
cuándo nadie nos había descifrado el cuerpo
ni nos había acariciado el alma
ni nos había admirado todos los defectos
cuándo nadie nos había llevado al espacio
ni nos había abrazado la ingravidez
ni nos había consolado en silencio
cuándo nadie había bajado al abismo
a buscarnos
ni se había vuelto loca para entendernos
ni nos había curado sin hacernos daño
cuándo nadie nos había esperado en la meta
ni nos había hecho posibles
ni había conseguido vencer nuestros miedos?
¿Recuerdas cuándo nadie se había aprendido
nuestra forma de ser
ni se había quedado sin estar
ni había estado para recordarnos lo que somos
cuando se nos había olvidado
cuándo nadie se había desnudado
para abrigarnos
ni nos había vestido de flores
ni nos había enseñado a ser humanas
cuándo nadie nos había hecho cambiar
alabándonos
ni nos había alabado el cambio
ni nos había querido en desarrollo
cuándo nadie había antepuesto nuestra felicidad
a la suya -aparte de nuestra madre-
ni nos había ayudado a encontrarnos
ni nos había encontrado?
Si lo recuerdas, amor, si todavía recuerdas
por qué me enamoré de ti
ahora que hemos preferido dejar de mentirnos
para hacernos felices y hacernos daño
para seguir siendo verdad
ahora que la realidad nos duele porque
hemos roto la ficción de bastarnos
sabrás por qué siempre comprenderé que te vayas
y, sobre todo, por qué te seguiré esperando.